¿Te gustaría saber cómo lograr tus objetivos sin agobiarte ni perder el tiempo? ¿Cómo enfocarte en lo que realmente importa y dejar de lado lo que no te aporta valor? Si tu respuesta es afirmativa, entonces este artículo es para ti.
En este artículo te voy a explicar qué es el principio de Pareto, cómo puedes aplicarlo en tu trabajo y qué beneficios puedes obtener gracias a él.
Te dejo el mismo contenido, pero en formato vídeo por si lo prefieres
El principio de Pareto o la regla 80/20 es una herramienta muy poderosa y sencilla que te ayudará a mejorar tu productividad, tu eficiencia y tu bienestar en el trabajo ¿Te animas a probarla?
¿QUÉ BENEFICIOS TIENES ESTE PRINCIPIO?
Aplicando este principio tanto en tu trabajo como en tu vida puedes tener los siguientes beneficios:
Con esta ley podrás priorizar lo que realmente importa, y así aumentará tu satisfacción y tu motivación en el trabajo.
También podrás reducir el estrés, la ansiedad y la frustración que generan las actividades que no te gustan o que no te hacen sentir realizado.
Además, podrás equilibrar mejor tu vida personal y profesional, al tener más tiempo libre para dedicarlo a lo que te hace feliz.
Mejorar tu productividad: Al enfocarte en las actividades clave, podrás lograr más resultados con menos esfuerzo.
¿QUÉ ES EXACTAMENTE LA LEY DE PARETO O LA REGLA DEL 80/20?
El principio de Pareto, también conocido como la regla del 80/20 fue formulado por el economista italiano Vilfredo Pareto a finales del siglo XIX, al observar que el 80% de la riqueza estaba en manos del 20% de la población.
Este principio se puede aplicar tanto a nuestra vida laboral como a nuestra vida personal.
El significado que tienes es que el 80% de los resultados se obtienen con el 20% de las acciones. Es decir, que hay algunas actividades que son más relevantes que otras para lograr tus objetivos.
La regla 80/20 te invita a identificar y priorizar esas actividades claves que te aportan más valor, y a reducir o eliminar las que te consumen tiempo y energía sin aportarte mucho beneficio.
Si aún no acabas de entender la idea, te voy a dar un ejemplo muy gráfico. Imagina que hoy tienes 10 tareas para realizar. De estas 10 tareas, dos de ellas serán las que te den el resultado del 80%.
Otro ejemplo, que podemos ver diariamente, es la ropa:
Normalmente de toda la ropa que tienes en tu armario, hay un 20% que te pones en el 80% de las ocasiones. Es por esta razón que muchas personas deciden tener un armario cápsula.
Retiran ese 80% que se ponen muy pocas veces y así se quedan con la ropa que sí se ponen. El resultado es que ahorran energía cada día a la hora de decidir qué ponerse y además sienten que tienen un armario con ropa que les encanta.
Una vez que ya sabes qué es y por qué es importante, viene el momento de la acción.
¿Cómo vas a aplicar este principio?
A continuación te explico una forma muy sencilla de aplicar este principio en tu trabajo.
¿CÓMO APLICAR EL PRINCIPIO DE PARETO EN TU TRABAJO?
Te voy a dar cuatro sencillos pasos para poner este principio en marcha.
1. Define tus objetivos:
Es importante saber qué es lo que quieres conseguir
¿Qué quieres realmente lograr con tu trabajo? Define exactamente qué es lo que quieres conseguir ¿Quizás quieres conseguir más ventas? ¿Más clientes?
Los objetivos cuanto más específicos mejor. Si lo que quieres es conseguir más ventas, pon el número exacto que quieres conseguir.
2. Analiza las actividades:
Analiza todas las actividades tanto las rutinarias como las ocasionales. Las puedes clasificar según su importancia y urgencia. Pregúntate:
¿Cómo influirá esta actividad en el objetivo que quiero lograr?
3. Aplica la regla 80/20:
A continuación identifica cuáles son el 20% de las actividades que te da un 80% de buenos resultados.
Plantéate qué actividades del 80% te están gastando tiempo, energía y recursos sin aportarte nada. Decide si las vas a eliminar o las vas a reducir.
¡Cuidado! Aplica el sentido común porque a veces puede ser que de estas actividades pueda salir algo importante. Este número es una aproximación y a veces no se cumple.
4. Planifica el tiempo:
Organiza el tiempo según las prioridades que tienes. Recuerda reservar tiempo para imprevistos y descansos.
Lo ideal es dedicar el 80% del tiempo a las actividades claves, es decir, a ese 20% que te da como resultado el 80%.
RESUMEN
En resumen, el principio de Pareto es una herramienta muy útil y efectiva para optimizar tu trabajo. Se basa en que el 80% de los resultados se obtienen solo con el 20% de las acciones.
Por eso, esta herramienta te ayuda a identificar y priorizar las actividades clave que te aportan más valor, y a reducir o eliminar las actividades secundarias que te consumen tiempo y energía sin aportarte muchos beneficios. Así podrás mejorar tu productividad, tu eficiencia y tu bienestar en el trabajo.
Ahora que ya sabes qué es el principio de Pareto y cómo puedes aplicarlo en tu trabajo, te invito a que lo pongas en práctica cuanto antes. Te aseguro que notarás la diferencia y te sorprenderás de los resultados que puedes lograr.
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